Protejamos a todos los futbolistas no sólo a dos o a tres.

El pasado domingo sobre las 21:30, más o menos, se produjo en el Vicente Calderón una entrada muy fea de Tomas Ujfalusi sobre Leo Messi. Todos estamos de acuerdo en que el checo se pasó con la entrada, ya que era el minuto 92 y las posibilidades de ganar el partido eran nulas, pero todo el revuelo que se está armando es porque el "agredido" ha sido Leo Messi. Si hubiese sido Sergi Enrich del Mallorca se hubiese tratado el tema durante muy pocas horas. Pero esto también hubiese ocurrido si en vez de Messi fuese CR7. La pregunta que se me formula en mi cabeza es la siguiente: ¿Por qué no nos alarmamos también y "denunciamos" entradas parecidas que hay en todos los partidos? Pues porque Callejón o Sergi Enrich no son tan mediáticos como CR7 o Messi o incluso Kun y Forlán. Hace unos años Luis Figo retiró del mundo del fútbol al exjugador del Zaragoza César Jiménez,cometiendo una entrada durísima sobre el futbolista. Tampoco olvidemos que el jugador del Barcelona Seydou Keita mandó a quirófano(dónde permaneció durante 5 ó 6 meses) a Matuzalem, también jugador del Zaragoza.

Principalmente la culpa de ésto, la tienen los señores colegiados, ya que si desde un principio del encuentro cortasen el juego duro cn la primera amarilla. Es una lástima que se deba ser así de estricto y cortar demasiadas veces el juego. Pero mientras los jugadores sigan manifestando ese juego duro sobre el verde no habrá más remedio.

Volviendo al tema Ujfalusi, dicho sea de paso, el checo se arrepintió en el acto de la entrada, porque a primera vista la intención del colchonero no es de hacer daño al rival. Además el propio jugador nada más cometer la entrada levanto el brazo izquierdo pidiendo perdón, gesto que le honra porque muchos jugadores siempre que cometen entradas fuertes levantan los brazos como diciendo que no le han tocado y se han tirado.

En resumidas cuentas deberíamos darle la misma importancia y proteger a todos los jugadores para salvaguardar el espectáculo que vemos domingo tras domingo en todos los campos de Primera División.